jueves, 5 de agosto de 2010

Once


Sé que he tardado mucho en ver esta película, no he tenido tiempo hasta ahora, pero no importa. La cuestión es que es preciosa, recomendable y me alegro de haberla visto. Es irlandesa, trata de músicos callejeros y está realizada con poquitos medios, con la cámara al hombro. Pero es sencilla, humana, limpia, emocionante. Y la banda sonora, cantada por los mismos protagonistas, pone los pelos de punta. La canción "Falling slowly", una maravilla, ganó el Oscar. Dos protagonistas principales: chico irlandés, pelirrojo y agradable; chica checa, típica eslava, rancia, directa y esquiva al mismo tiempo, de raro encanto. Algunos secundarios mínimos que hacen lo que tienen que hacer perfectamente. Y poco más. Pienso en alguna -la mayoría-de esas superproducciones de los últimos años, llenas de estrellas, con altos presupuestos... e historias retorcidas que te dejan frío, indiferente. "Once" está llena de verdad, de vida y de emociones. Está claro que no es cuestión de dinero.