ESCENA CUMBRE
-Sólo sé que no sé nada
-Pues… entonces, todos contentos
FINAL ALTERNATIVO:
-Sólo sé que no sé nada
-Pues… estamos apañados.
MONTAJE DEL DIRECTOR:
Sócrates desciende aliviado de la Acrópolis, cuando se ve a Protilo correr hacia él con una lentitud enojosa. Su rostro refleja ansiedad, y tras mirar a Sócrates de hito en hito, le inquiere:
-Maestro: ¿qué tienes que decirme?
Sócrates, con un gesto en el que anida un cansancio infinito, eleva la vista al cielo, suspira, se mesa la barba, le mira de nuevo, por si todavía sigue ahí, y finalmente, con hastío, proclama:
-Sólo sé que no sé nada.
Protilo vacila, la vida entera pasa por su mente (largo flashback, incluyendo a madre muerta). Tras interminables minutos, habla:
-Pues… como soy un siervo fiel de tu sabiduría, que ni merezco ni me quieres dar, seguiré viniendo cada mañana a preguntarte, hasta confíes en mí como el discípulo que necesitas y yo obtenga esa respuesta que anhelo. Así podremos decir que… entonces, todos contentos.
Sócrates palidece. El director dice “corten”, Sócrates enciende un pitillo, Protilo se pone a ligar con la script. En ese momento el técnico de sonido estalla:
-¡Este cacharro no deja de grabar…! Estamos apañados.
-Sólo sé que no sé nada
-Pues… entonces, todos contentos
FINAL ALTERNATIVO:
-Sólo sé que no sé nada
-Pues… estamos apañados.
MONTAJE DEL DIRECTOR:
Sócrates desciende aliviado de la Acrópolis, cuando se ve a Protilo correr hacia él con una lentitud enojosa. Su rostro refleja ansiedad, y tras mirar a Sócrates de hito en hito, le inquiere:
-Maestro: ¿qué tienes que decirme?
Sócrates, con un gesto en el que anida un cansancio infinito, eleva la vista al cielo, suspira, se mesa la barba, le mira de nuevo, por si todavía sigue ahí, y finalmente, con hastío, proclama:
-Sólo sé que no sé nada.
Protilo vacila, la vida entera pasa por su mente (largo flashback, incluyendo a madre muerta). Tras interminables minutos, habla:
-Pues… como soy un siervo fiel de tu sabiduría, que ni merezco ni me quieres dar, seguiré viniendo cada mañana a preguntarte, hasta confíes en mí como el discípulo que necesitas y yo obtenga esa respuesta que anhelo. Así podremos decir que… entonces, todos contentos.
Sócrates palidece. El director dice “corten”, Sócrates enciende un pitillo, Protilo se pone a ligar con la script. En ese momento el técnico de sonido estalla:
-¡Este cacharro no deja de grabar…! Estamos apañados.
9 comentarios:
El lobo tapando la cara de Sócrates la quita (¿o le da?) credibilidad a la historia.
¿Quién dirige?
Un lobo se ha desmandado, ¿y qué? Esto pasa en las mejores familias, y nunca en otras categorías.
El director es David Wark Griffith, por su puesto, famoso por el cuidado que ponía en sus diálogos.
¿Ese es el lobo estepario? Si Hermann Hesse levantase la cabeza...
Bueno, centrándonos en el tema:
Sócrates debería dejar de fumar.
Protilo debería dejar de correr con lentitud enojosa si quiere poner fin a su ansiedad.
Y alguien debería despedir al técnico de sonido.
Como diría Juan Tejero: ¡Este rodaje es la guerra!
Como sospechaba, nadie se ha percatado de que Sócrates descendía aliviado de la Acrópolis. Se suele creer que los montajes del director no añaden nada, sólo minutos de más.
Craso error.
De lo que si me he percatado es de que podías haber puesto una imágen de Sócrates ya que estamos, y no una de Platón, a no ser que el primero se trasformara en su discípulo tras bajar de la Acrópolis...
Bueno, bueno, no seamos tiquismiquis, lo importante es que tenga barba.
(Mecachis).
Defecto profesional, lo siento...
Tranquila, no te vayas a guardar tus defectos sólo para ti...
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